LAS SONRISAS TAMBIEN PUEDEN SALIR DE LA MISERIA

Juanjo Aguado es un jesuita que trabaja de voluntario para el servicio jesuita a refugiados en el Congo.

El junto a su equipo y colaboradores están en la misión de convertir un mundo lleno de miseria, violencia e injusticias en un mundo mejor, un mundo justo y digno para todos los seres humanos.

En medio de las dificultades y de la violencia el verdadero objetivo de ellos es devolverle la vida y las ganas de vivir a todos esos desplazados a los cuales la guerra les quito todo, comenzando por aquellos que desde muy pequeños o desde que nacieron han vivido en la miseria, sin ninguna razón para sonreír o ser felices.

Esa es la razón por lo que este grupo de personas, por todos los medios posibles ha buscado su seguridad y su bienestar, ofreciéndoles un futuro por medio del estudio. Aunque son muy conscientes de las dificultades que tienen por delante, no dejan de luchar porque cada vez más niños puedan ir al colegio, y cada vez más colegios sean un lugar donde se aprende, a leer y a escribir, a sumar y a restar, pero sobretodo un lugar para que estos niños que son el futuro del Congo y del mundo, aprendan a pensar y a comprometerse con los demás y con su país, para que algún día este llegue a ser un país en paz, justo y digno para todos sus habitantes.

JUAN PABLO JARAMILLO 11 C